Hotel económico, limpio, buena ubicación y personal agradable. Algunos trabajadores hablaban español. Baños compartidos pero limpios y sin colas. En la habitación hay un lavabo y espejo. No había tv en la habitación. El desayuno, aunque poco variado café, zumo, té, pan, cereales, croissants, mermelada, mantequilla y fiambre era muy abundante, pudiendo repetir lo que quisieras. Microondas compartido. Mucha gente joven, pero muy tranquilo.
Estancia en el hotel: Junio 2013