Bastante normal para tener cuatro estrellas. La atención de los recepcionistas y del personal del spa muy buena. Ahora vamos con las desventajas el desayuno tipo buffet escaso en variedad, con zumo de naranja de bote y mini salchichas también de bote. La habitación normalilla, con algún que otro ruido pues daba a la calle, y por terminar el secador de pelo que hay en ellas horrible.
Estancia en el hotel: Marzo 2015