El Hotel está genial, la comida también. El único inconveniente fue que en El Ejido no hay nada en los alrededores, solo invernaderos y más invernaderos... El pueblo es muy tranquilo a unos km se encuentra Almerimar que está algo mejor, las playas son de piedra y el agua está llena de algas. Aguadulce es un pueblo cercano, unos 20 kilómetros que tiene más marcha. En fin, que para encontrar algo interesante tienes que tener coche a no ser que te encante ver invernaderos. La habitación es muy bonita, tiene aire acondicionado, la cama es cómoda y todo es muy nuevo. A mi me ha resultado muy aburrido el pueblo. La relación calidad precio es muy buena.
Estancia en el hotel: Agosto 2011